Roberto Alvarado, Ajkem Tejedores
Desde hace aproximadamente tres años, nace un movimiento en la ciudad de Cobán, denominado “Observatorio ciudadano para la paz”, con la finalidad de colaborar de manera estrecha mediante el diálogo e incidencia, para el buen funcionamiento de las instituciones del Estado.
Este movimiento de observatorios se ha ido incrementando y tiene presencia en más de 10 municipios de Alta y Baja Verapaz como también en Jalapa, un movimiento que merece nuestro reconocimiento porque es algo que nos hace falta a los guatemaltecos, un ente que nos una y que nos pueda mostrar que podemos sumar.
El movimiento de los “Observatorios ciudadanos para la paz” ha logrado unir el esfuerzo de empresarios, campesinos, católicos, evangélicos, profesionales, hombres y mujeres que aún tienen confianza y esperanza de ver una mejor Guatemala, dando su tiempo en cosas positivas mediante una acción de carácter voluntario, velando ante todo que las instituciones del Estado cumplan con sus objetivos. Para ello han desarrollado investigaciones, análisis y evaluaciones sobre el cumplimiento de las leyes vigentes.
Desde hace dos meses con la debida anticipación procedieron a girar invitaciones a los gobernadores de Alta y Baja Verapaz, como también a los 11 diputados electos de ambos departamentos para iniciar un proceso de acercamiento y buscar soluciones mediante el diálogo, para garantizar que las instituciones estatales reactiven sus procedimientos y brinden mejor calidad de servicios en salud, educación, seguridad, medio ambiente, seguridad alimentaria. Pese a la incidencia desarrollada desde varios ángulos diplomáticos y oficiales, para garantizar la presencia de los gobernadores y diputados, no asistieron a la presentación de los resultados de los observatorios.
Con la ausencia y desplante de los señores gobernadores departamentales y diputados se evidencia que hay una ausencia de voluntad por parte de dichos funcionarios, para el cumplimiento de sus deberes. Sin embargo, prevalece la buena voluntad y fe entre los hombres y mujeres de los observatorios por continuar su labor y buscar mecanismos de acercamiento con las autoridades respectivas. Mi llamado a los diputados y gobernadores para abrir los espacios de diálogo y hacer lo que les compete, para buscar y garantizar una mejor calidad de vida para todos. No podemos seguir viviendo solo de discursos y ofertas de campaña barata, es necesario aprender a sumar y no a dividir, es urgente quitarnos las camisetas del egoísmo e individualismo.
Mi reconocimiento y admiración de tan noble labor de los Observatorios que aún mantienen la esperanza de tener una mejor Guatemala.
